Un incidente aterrador tuvo lugar en el Aeropuerto Internacional de Niza Costa Azul, donde dos aviones, uno de la aerolínea británica EasyJet y otro de la compañía tunecina Nouvelair, estuvieron a solo tres metros de una colisión fatal. Este evento, que involucró a más de 300 personas a bordo, ocurrió el pasado domingo por la noche y dejó a los pasajeros y a la tripulación en estado de shock.
El vuelo de EasyJet, que llevaba a 150 pasajeros, estaba en espera de autorización para despegar con destino a Nantes. Por otro lado, el avión de Nouvelair se aproximaba a gran velocidad para aterrizar, pero lo hacía por una pista equivocada. Este error crítico casi resultó en un desastre aéreo, ya que ambos aviones se encontraron en una trayectoria de colisión.
### El momento del peligro
Los momentos previos a la colisión fueron tensos. Según los testimonios de los pasajeros, el capitán del vuelo de EasyJet relató que la colisión se evitó por un margen extremadamente estrecho de solo tres metros. Afortunadamente, el piloto de Nouvelair reaccionó a tiempo y abortó la maniobra de aterrizaje, realizando una ascensión de emergencia. Sin embargo, el fuerte temporal que afectaba la visibilidad en el aeropuerto complicó aún más la situación, generando un ambiente de pánico entre los pasajeros.
Los viajeros del vuelo de EasyJet, que ya estaban sentados y con los cinturones de seguridad abrochados, experimentaron un momento de gran tensión al escuchar un fuerte ruido proveniente del motor del avión de Nouvelair. Este sonido fue el resultado de la maniobra de emergencia que se llevó a cabo para evitar el choque. Un testigo del incidente comentó que “los pasajeros se encontraban en estado de shock”, reflejando el temor que se apoderó de todos en la aeronave.
La tripulación de EasyJet decidió cancelar el despegue tras el incidente, lo que dejó a los pasajeros varados en el aeropuerto mientras esperaban un nuevo vuelo. Este tipo de situaciones pone de manifiesto la importancia de la seguridad aérea y la necesidad de procedimientos rigurosos para evitar errores que puedan poner en riesgo la vida de los pasajeros.
### Reacciones y consecuencias
El ministro de Transporte francés, Philippe Tabarot, calificó el incidente como “evitado por muy poco” y ordenó una investigación inmediata para esclarecer las circunstancias que llevaron a este casi accidente. Las autoridades del aeropuerto de Niza han responsabilizado a los pilotos de Nouvelair, sugiriendo que se trató de un grave error de procedimiento que podría haber tenido consecuencias devastadoras.
Los pasajeros del vuelo de EasyJet, que vivieron momentos de angustia, expresaron su alivio tras el segundo intento de aterrizaje del avión de Nouvelair. James Johnson, un pasajero de 33 años, comentó que “todo el avión estalló en aplausos tras el segundo intento de aterrizaje, sin saber que estuvimos tan cerca de la muerte”. Este tipo de reacciones son comunes en situaciones de crisis, donde la adrenalina y el alivio se combinan en un momento de intensa emoción.
El incidente ha reavivado el debate sobre la seguridad en la aviación comercial y la necesidad de mantener altos estándares de entrenamiento y procedimientos para los pilotos. La comunidad aérea y los organismos reguladores están bajo presión para garantizar que se implementen medidas adecuadas que prevengan que situaciones como esta se repitan en el futuro.
A medida que se lleva a cabo la investigación, se espera que se tomen medidas correctivas para mejorar la seguridad en el Aeropuerto Internacional de Niza y en otros aeropuertos donde se puedan presentar condiciones similares. La seguridad de los pasajeros debe ser siempre la prioridad número uno en la aviación, y este incidente es un recordatorio de los riesgos que pueden surgir en el transporte aéreo.
La experiencia vivida por los pasajeros de EasyJet y Nouvelair es un claro ejemplo de cómo la aviación, a pesar de ser uno de los medios de transporte más seguros, puede enfrentar situaciones de alto riesgo. La capacidad de los pilotos para reaccionar rápidamente y tomar decisiones críticas en momentos de crisis es fundamental para garantizar la seguridad de todos a bordo. Este evento no solo destaca la importancia de la formación y la experiencia de los pilotos, sino también la necesidad de un enfoque continuo en la mejora de los procedimientos de seguridad en la aviación.
