La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha expresado su desaprobación ante el desalojo del concierto del cantante vasco Fermín Muguruza, que tuvo lugar en el Multiforo Alicia. Este incidente, que involucró a elementos de la Guardia Nacional y del Ejército, ha llevado a la mandataria a anunciar una revisión del protocolo que determina en qué circunstancias puede intervenir el Ejército en operativos de desalojo. Durante su conferencia matutina del 2 de junio de 2025, Sheinbaum enfatizó la necesidad de modificar este protocolo para evitar que situaciones similares se repitan en el futuro.
La mandataria subrayó que la actuación de las fuerzas de seguridad en este caso no fue adecuada y que es fundamental que el Multiforo Alicia continúe operando con todos los permisos necesarios. «Tiene que cambiarse este protocolo para que no vuelva a ocurrir una situación de este tipo», afirmó Sheinbaum. Este comentario se produce en un contexto donde la relación entre la ciudadanía y las fuerzas de seguridad ha sido objeto de debate, especialmente en lo que respecta a la intervención del Ejército en asuntos de orden civil.
El desalojo del Multiforo Alicia ha generado una serie de reacciones tanto en la opinión pública como en el ámbito político. La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, quien también estuvo presente en la reunión del Gabinete de Seguridad federal, ha confirmado que los mandos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) solicitaron la participación del Ejército durante el operativo. Este hecho ha suscitado críticas y cuestionamientos sobre la necesidad de una mayor regulación en la colaboración entre las fuerzas de seguridad locales y las federales.
### La Revisión del Protocolo Militar
La revisión del protocolo que regula la participación del Ejército en operativos de desalojo es un tema que ha cobrado relevancia en el discurso político actual. Sheinbaum ha indicado que este asunto será discutido en futuras reuniones del Gabinete de Seguridad, donde se buscará establecer criterios claros sobre cuándo y cómo debe intervenir el Ejército en situaciones de orden público. La mandataria ha señalado que es esencial que se definan los límites de la actuación militar para garantizar que no se vulneren los derechos de los ciudadanos.
La intervención del Ejército en operativos de desalojo ha sido un tema controvertido en México, especialmente en un contexto donde la militarización de la seguridad pública ha sido objeto de críticas. Muchos ciudadanos y organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación por el uso de la fuerza militar en situaciones que podrían ser manejadas por las autoridades civiles. En este sentido, la revisión del protocolo podría ser un paso hacia una mayor transparencia y rendición de cuentas en el uso de la fuerza pública.
Por su parte, Clara Brugada ha defendido la necesidad de contar con un esquema de vigilancia que involucre a diferentes niveles de gobierno y fuerzas de seguridad. Sin embargo, ha reconocido que la actuación en el caso del Multiforo Alicia fue desproporcionada y que se deben establecer mecanismos que eviten que se repitan incidentes similares. La jefa de Gobierno ha manifestado su compromiso de trabajar en conjunto con el secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Trevilla Trejo, para definir los parámetros de actuación del Ejército en la Ciudad de México.
### Reacciones y Consecuencias del Desalojo
El desalojo del Multiforo Alicia no solo ha generado un debate sobre la intervención del Ejército, sino que también ha tenido repercusiones en la comunidad artística y cultural. Este espacio ha sido un punto de encuentro para diversas expresiones culturales y artísticas, y su cierre temporal ha suscitado la preocupación de artistas y promotores culturales que ven en este tipo de acciones una amenaza a la libertad de expresión y a la cultura en general.
Activistas y miembros de la comunidad cultural han alzado la voz en defensa del Multiforo Alicia, argumentando que la cultura no debe ser objeto de represión. La secretaria de Cultura de la Ciudad de México ha calificado el operativo como «una acción pasada de lanza», lo que refleja la tensión existente entre las autoridades y la comunidad artística. Esta situación pone de manifiesto la necesidad de un diálogo más abierto y constructivo entre el gobierno y los sectores culturales, así como la importancia de garantizar espacios seguros para la expresión artística.
En este contexto, la revisión del protocolo militar y la discusión sobre la intervención del Ejército en operativos de desalojo se presentan como una oportunidad para replantear la relación entre las fuerzas de seguridad y la ciudadanía. La búsqueda de un equilibrio entre la seguridad pública y el respeto a los derechos humanos es un desafío que las autoridades deben enfrentar con seriedad y compromiso.
