La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha anunciado un hito significativo en la economía del país: la inversión extranjera directa (IED) alcanzó un récord histórico de 21 mil 400 millones de dólares en el primer trimestre de 2025. Este notable incremento, según la Secretaría de Economía, no solo refleja la confianza de los inversionistas en el país, sino que también es un testimonio del impacto positivo de las políticas económicas implementadas durante la Cuarta Transformación.
El anuncio fue realizado en una conferencia de prensa matutina, donde Sheinbaum destacó que este aumento en la inversión es un indicativo de que el modelo de humanismo mexicano, promovido por su administración, está funcionando. «La inversión extranjera directa en México alcanzó el máximo histórico de 21 mil 400 millones de dólares en el primer trimestre de 2025. Funciona el humanismo mexicano de la Cuarta Transformación: Por el bien de todos, primero los pobres», afirmó la mandataria.
Este crecimiento en la inversión extranjera es especialmente relevante en un contexto global donde la incertidumbre económica ha sido una constante. La presidenta enfatizó que, a pesar de los cambios en los aranceles y las condiciones internacionales, los indicadores económicos de México son muy positivos. «Uno pensaría que hay demasiada incertidumbre y no hay inversión, pero resulta que la inversión extranjera en México en el primer trimestre fue mayor que la de 2024. Eso quiere decir que hay confianza en la inversión en nuestro país», agregó.
### Factores que Impulsan la Inversión Extranjera
El aumento en la inversión extranjera directa puede atribuirse a varios factores clave que han creado un entorno favorable para los inversionistas. Uno de los elementos más destacados es la estabilidad política y económica que ha promovido el gobierno de Sheinbaum. La administración ha trabajado en la creación de políticas que fomentan la transparencia y la seguridad jurídica, aspectos fundamentales para atraer capital extranjero.
Además, la implementación de proyectos de infraestructura y desarrollo social ha sido un pilar en la estrategia del gobierno. La creación de los llamados «Polos para el Bienestar» es un ejemplo de cómo se busca no solo atraer inversión, sino también asegurar que esta beneficie a las comunidades locales. Estos proyectos están diseñados para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y, al mismo tiempo, generar un ambiente propicio para los negocios.
Otro factor que ha influido en el aumento de la IED es la diversificación de la economía mexicana. La apertura a nuevos mercados y la promoción de sectores como la tecnología, la energía renovable y la manufactura avanzada han ampliado las oportunidades para los inversionistas. Esto ha permitido que México se posicione como un destino atractivo para empresas que buscan expandir sus operaciones en América Latina.
### Retos y Oportunidades en el Horizonte
A pesar de los resultados positivos en términos de inversión extranjera, el gobierno de Sheinbaum enfrenta desafíos significativos. La incertidumbre global, exacerbada por factores como la pandemia de COVID-19 y las tensiones geopolíticas, sigue siendo una preocupación para los inversionistas. La presidenta ha reconocido que es fundamental mantener un diálogo abierto con el sector privado para abordar estos retos y asegurar que México siga siendo un lugar atractivo para la inversión.
Además, la administración debe continuar trabajando en la mejora de la infraestructura y en la capacitación de la fuerza laboral. La educación y la formación profesional son esenciales para garantizar que los mexicanos estén preparados para los empleos del futuro, especialmente en sectores en crecimiento como la tecnología y la sostenibilidad.
La inversión extranjera directa no solo es crucial para el crecimiento económico, sino que también tiene un impacto directo en la creación de empleos y en el desarrollo social. A medida que más empresas extranjeras establecen operaciones en México, se generan oportunidades laborales que pueden transformar la vida de muchas personas.
En resumen, el récord de inversión extranjera directa en el primer trimestre de 2025 es un signo alentador para la economía mexicana. La confianza de los inversionistas en el país, impulsada por políticas efectivas y un enfoque en el bienestar social, sugiere que México está en el camino correcto hacia un futuro más próspero. Sin embargo, es esencial que el gobierno continúe abordando los desafíos existentes y aproveche las oportunidades que se presentan en el horizonte.