La reciente creación de Transparencia para el Pueblo marca un nuevo capítulo en la gestión de la transparencia y el acceso a la información en México. Este organismo, que sustituye al Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), tiene como objetivo fortalecer la rendición de cuentas y garantizar el derecho de los ciudadanos a acceder a la información pública. María Tanivet Ramos, quien fue presentada como la nueva titular del organismo, cuenta con una sólida trayectoria en el ámbito de la transparencia y la administración pública.
**Perfil de María Tanivet Ramos**
María Tanivet Ramos es licenciada en Ciencias Políticas y Administración Pública por la Universidad Iberoamericana de Puebla. Su carrera profesional ha estado marcada por su compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas. Desde 2021 hasta 2024, fue parte del Órgano Garante de Acceso a la Información Pública en Oaxaca, donde desempeñó roles clave que la llevaron a ser reconocida como una experta en la materia. Antes de asumir la dirección de Transparencia para el Pueblo, se desempeñó como directora general de Transparencia y Gobierno Abierto en la Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno, donde trabajó en la implementación de políticas que fomentan la apertura gubernamental y el acceso a la información.
La presentación de Ramos como titular del nuevo organismo fue realizada por la secretaria Anticorrupción, Raquel Buenrostro, quien destacó la importancia de la transición ordenada del INAI a Transparencia para el Pueblo. Este cambio no solo implica un cambio de nombre, sino también un compromiso renovado con la transparencia en el gobierno federal. La secretaria Buenrostro agradeció a los ex funcionarios del INAI por su colaboración en este proceso, lo que sugiere un enfoque en la continuidad y la mejora de las prácticas de transparencia en el país.
**Nuevos integrantes del organismo**
Además de María Tanivet Ramos, el nuevo organismo contará con la incorporación de Julio César Martínez Sanabria y Laura Carolina Arce Sosa. Martínez Sanabria, quien tiene una amplia experiencia en el INAI y el IFAI, asumirá la Dirección General de Recursos de Revisión e Inconformidad. Este cargo es crucial, ya que será responsable de atender y resolver las quejas de los ciudadanos en relación con el acceso a la información. Su experiencia en áreas operativas del INAI lo posiciona como un líder en la gestión de las reclamaciones y en la mejora de los procesos de revisión.
Por su parte, Laura Carolina Arce Sosa, quien también ha trabajado en el INAI, ocupará la Dirección General de Obligaciones. Su función será asegurarse de que las dependencias federales cumplan con la obligación de difundir información pública, un aspecto fundamental para garantizar la transparencia en la administración pública. La inclusión de estos profesionales con experiencia en el ámbito de la transparencia refuerza la capacidad del nuevo organismo para enfrentar los desafíos que se presenten en el futuro.
La reinauguración del edificio que anteriormente albergaba al INAI está programada para el lunes, lo que simboliza el inicio de una nueva etapa en la gestión de la transparencia en México. Este cambio de sede no solo representa un cambio físico, sino también un cambio en la filosofía y el enfoque hacia la transparencia y el acceso a la información. La creación de Transparencia para el Pueblo se produce en un contexto donde la confianza de los ciudadanos en las instituciones ha sido puesta a prueba, y se espera que este nuevo organismo trabaje para restaurar esa confianza a través de prácticas transparentes y accesibles.
La transición del INAI a Transparencia para el Pueblo ha generado diversas reacciones en la sociedad. Algunos sectores han expresado su preocupación por la posible disminución de la capacidad del nuevo organismo para garantizar el acceso a la información, mientras que otros ven esta reestructuración como una oportunidad para mejorar la rendición de cuentas en el gobierno. La efectividad de este nuevo organismo dependerá en gran medida de la implementación de políticas claras y de la capacidad de sus líderes para fomentar una cultura de transparencia en todas las áreas del gobierno.
En este nuevo contexto, es fundamental que los ciudadanos se mantengan informados y participen activamente en el proceso de rendición de cuentas. La transparencia no solo es responsabilidad de las instituciones, sino también de la sociedad civil, que debe exigir un gobierno abierto y accesible. La creación de Transparencia para el Pueblo es un paso significativo hacia la mejora de la gobernanza en México, y su éxito dependerá de la colaboración entre el gobierno y la ciudadanía para construir un futuro más transparente y responsable.