Las intensas lluvias que azotaron la Ciudad de México el pasado 11 de agosto de 2025 han generado una serie de complicaciones en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), afectando a miles de pasajeros y provocando la suspensión de numerosos vuelos. Ante esta situación, las autoridades han tomado medidas para mitigar el impacto y garantizar la operación del aeropuerto en el futuro.
La tormenta, que se registró durante la madrugada del 12 de agosto, obligó a las aerolíneas a cancelar y reprogramar vuelos, dejando a más de 30,000 personas varadas en el AICM. La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), junto con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y el Gobierno de la Ciudad de México, se reunieron para abordar las afectaciones y establecer un plan de acción.
### Coordinación Interinstitucional para la Recuperación
La reunión interinstitucional fue encabezada por el Secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, Jesús Antonio Esteva Medina, y contó con la participación de altos funcionarios del AICM y Conagua. Durante el encuentro, se discutieron diversas acciones para garantizar la operación segura y continua del aeropuerto, así como para atender a los pasajeros afectados por las cancelaciones.
Entre las medidas acordadas se encuentra la implementación de un sistema de monitoreo más efectivo para prever y gestionar situaciones climáticas adversas. Esto incluye la instalación de equipos de medición de lluvia y la mejora de los sistemas de drenaje en las instalaciones del aeropuerto. La idea es que, en caso de lluvias intensas, se puedan tomar decisiones rápidas y efectivas para minimizar el impacto en las operaciones aéreas.
Además, se estableció un protocolo de comunicación más claro entre las aerolíneas y los pasajeros, para que estos últimos estén informados sobre el estado de sus vuelos en tiempo real. La SICT también ha solicitado a las aerolíneas que mantengan una línea de atención al cliente activa para resolver dudas y brindar asistencia a los pasajeros que se encuentren en situaciones complicadas.
### Consecuencias para los Pasajeros
La situación ha generado un gran malestar entre los pasajeros, muchos de los cuales se han visto obligados a esperar horas, e incluso días, para poder reprogramar sus vuelos. La Profeco, la Procuraduría Federal del Consumidor, ha intervenido en la situación, recuperando más de 277,000 pesos a favor de los afectados por las demoras y cancelaciones. La institución también ha brindado asesorías a más de 135 personas que se vieron perjudicadas por la situación.
Los pasajeros han expresado su frustración a través de redes sociales y medios de comunicación, señalando la falta de información y la escasa atención por parte de las aerolíneas. Muchos han tenido que buscar alojamiento temporal en la ciudad, lo que ha incrementado los costos de su viaje y ha generado un impacto emocional significativo.
Las autoridades han reconocido la necesidad de mejorar la infraestructura del AICM para hacer frente a fenómenos climáticos extremos, que se han vuelto más frecuentes debido al cambio climático. La inversión en tecnología y en la mejora de los sistemas de drenaje es fundamental para evitar que situaciones como esta se repitan en el futuro.
### El Futuro del AICM y la Gestión de Crisis
La reciente crisis ha puesto de manifiesto la importancia de contar con un plan de gestión de crisis efectivo en el AICM. Las autoridades han señalado que, además de las mejoras en la infraestructura, es crucial establecer protocolos de actuación ante emergencias climáticas. Esto incluye la capacitación del personal del aeropuerto y de las aerolíneas para que puedan responder de manera adecuada ante situaciones adversas.
La SICT ha anunciado que se llevarán a cabo simulacros y capacitaciones periódicas para preparar a todos los involucrados en la operación del aeropuerto. La idea es que, en caso de que se presenten lluvias intensas o cualquier otro fenómeno natural, el personal esté preparado para actuar de manera rápida y eficiente, minimizando así el impacto en los pasajeros y en las operaciones del aeropuerto.
Por otro lado, se ha planteado la posibilidad de implementar un sistema de alertas tempranas que permita a los pasajeros y a las aerolíneas estar informados sobre las condiciones climáticas en tiempo real. Esto podría incluir notificaciones a través de aplicaciones móviles y mensajes de texto, facilitando así la comunicación y la toma de decisiones.
### Reflexiones sobre la Infraestructura Aeroportuaria
La situación vivida en el AICM resalta la necesidad de una revisión exhaustiva de la infraestructura aeroportuaria en México. Con el aumento de la población y el crecimiento del turismo, es fundamental que el país invierta en la modernización y ampliación de sus aeropuertos. Esto no solo mejorará la experiencia de los pasajeros, sino que también contribuirá a la seguridad y eficiencia de las operaciones aéreas.
Las autoridades deben considerar la posibilidad de construir nuevas terminales o ampliar las existentes, así como mejorar los accesos y la conectividad del aeropuerto con el resto de la ciudad. La creación de un plan maestro para el desarrollo del AICM podría ser una solución a largo plazo que garantice su operatividad ante fenómenos climáticos y el crecimiento del tráfico aéreo.
En resumen, las recientes lluvias en la Ciudad de México han puesto a prueba la capacidad de respuesta del AICM y han revelado áreas de mejora en la gestión de crisis y en la infraestructura aeroportuaria. Las acciones que se tomen en los próximos meses serán cruciales para garantizar que el aeropuerto pueda operar de manera segura y eficiente en el futuro, protegiendo así a los pasajeros y a las aerolíneas de situaciones similares.