La longevidad es un fenómeno cada vez más común en nuestras sociedades, lo que plantea la necesidad de adoptar hábitos que promuevan un envejecimiento saludable. La nutrióloga Alejandra Romero, Delegada General del Instituto Danone, enfatiza que es crucial comenzar a cuidar nuestro bienestar físico, mental y social desde etapas tempranas de la vida. En un reciente evento sobre alimentación saludable, Romero destacó que el envejecimiento saludable no se puede construir de la noche a la mañana, especialmente cuando ya se han acumulado años de hábitos poco saludables.
### La Importancia de la Nutrición en el Envejecimiento
La nutrición juega un papel fundamental en cómo envejecemos. Según Romero, es esencial abordar el envejecimiento saludable desde la infancia, lo que implica prestar atención a la dieta de los niños y asegurarse de que sus alimentos estén fortificados con las vitaminas y minerales necesarios. La nutrióloga subraya que los requerimientos nutricionales varían a lo largo de la vida y son diferentes para hombres y mujeres, así como entre diferentes culturas. Por ello, es vital desarrollar un portafolio de alimentos que se adapte a las necesidades cambiantes de cada etapa de la vida.
DANONE se ha comprometido a investigar cómo la dieta influye en el envejecimiento y a innovar en la creación de alimentos que sean nutritivos, accesibles y sostenibles. Esto incluye trabajar en colaboración con agricultores y expertos en salud para garantizar que los productos no solo sean saludables, sino que también mantengan un buen sabor y experiencia alimentaria. Romero enfatiza que la alimentación debe ser un placer, no un sacrificio.
Además, la nutrióloga recomienda incluir una variedad de frutas y verduras en cada comida, así como optar por cereales integrales que beneficien la salud general. También destaca la importancia de los alimentos fermentados, como el yogur y el kéfir, que ayudan a mantener una microbiota intestinal saludable, un factor clave en el bienestar general.
### Estilo de Vida y Hábitos Saludables
No solo la alimentación es crucial para un envejecimiento saludable; el estilo de vida también juega un papel determinante. Romero señala que es fundamental ser más activos y mantener rutinas que fomenten el movimiento. Actividades cotidianas como caminar, limpiar la casa o practicar deportes son excelentes maneras de mantenerse en forma.
El sueño es otro aspecto que no debe pasarse por alto. La calidad del sueño es tan importante como la cantidad. Un sueño reparador contribuye a una mejor salud mental y física, lo que a su vez impacta positivamente en la microbiota intestinal. Romero sugiere que, aunque es difícil evitar el estrés en la vida moderna, es esencial encontrar momentos de relajación y desconexión para mejorar nuestro bienestar integral.
La nutrióloga también menciona que no hay una edad específica para comenzar a cuidar de nuestra salud. Aunque se suele pensar que a los 60 años es tarde para hacer cambios significativos, ella asegura que nunca es demasiado tarde para adoptar hábitos saludables. Sin embargo, recomienda que a partir de los 40 años, las personas deberían comenzar a tomar conciencia de su salud y hacer ajustes en su estilo de vida.
En resumen, el envejecimiento saludable es un proceso que se construye a lo largo de toda la vida. La combinación de una buena nutrición, un estilo de vida activo y la gestión del estrés son claves para disfrutar de una vejez plena y saludable. La información es poder, y buscar fuentes confiables sobre nutrición y salud es fundamental para tomar decisiones informadas que impacten positivamente en nuestra calidad de vida a medida que envejecemos.
La nutrióloga Romero concluye que, aunque la ciencia ha avanzado en la comprensión de cómo la dieta y el estilo de vida afectan nuestro envejecimiento, cada individuo debe encontrar un equilibrio que funcione para ellos, adaptando sus hábitos a sus necesidades y circunstancias personales. Con el enfoque correcto, es posible no solo vivir más tiempo, sino también vivir mejor.