La figura de Malintzin, conocida popularmente como La Malinche, ha sido objeto de controversia y debate a lo largo de la historia de México. En un esfuerzo por reivindicar su legado y el de las mujeres indígenas, la presidenta Claudia Sheinbaum ha anunciado una serie de eventos que se llevarán a cabo en la última parte del año. Estas actividades, bajo el título «Mujeres del Maíz», buscan dar visibilidad a la historia y la cultura de las mujeres indígenas, así como a la figura de Malintzin, quien ha sido malinterpretada y estigmatizada a lo largo de los años.
La primera de estas actividades comenzará el 12 de octubre con una muestra de danza en el Zócalo de la Ciudad de México. Este evento no solo celebrará la cultura indígena, sino que también marcará el inicio de un ciclo de actividades que se centrarán en la reivindicación de la figura de Malintzin. En su conferencia de prensa, Sheinbaum destacó que este año es particularmente significativo, ya que se conmemora el «Año de la Mujer Indígena». La mandataria subrayó que la reivindicación de Malintzin es esencial, ya que a menudo ha sido vista como una traidora en la narrativa histórica, especialmente desde el siglo XIX.
La historia de Malintzin es compleja. Nacida en el actual México, fue una mujer indígena que jugó un papel crucial durante la conquista española. A menudo es retratada como la traidora que ayudó a Hernán Cortés, pero esta visión simplista ignora las múltiples dimensiones de su vida y su contexto. En el marco del Día Internacional de la Traducción, la presidenta enfatizó la importancia de reexaminar la figura de Malintzin y de reconocer su papel como una mujer resiliente que, a pesar de las adversidades, logró ser una voz en un momento crítico de la historia.
El 19 de octubre, se llevará a cabo un foro titulado «¡Qué traidora ni que la chingada! ¿Quién es Malintzin?» en la Feria Internacional del Libro en el Zócalo. Este evento busca abrir un espacio de diálogo y reflexión sobre la figura de Malintzin, con la participación de académicos, historiadores y representantes de comunidades indígenas. La intención es desmitificar la imagen negativa que ha rodeado a Malintzin y ofrecer una perspectiva más matizada de su vida y su legado.
Además, el 27 de noviembre se realizará un coloquio internacional en el Palacio de Bellas Artes, titulado «Malintzin: Mujer palabra». Este evento reunirá a expertos en temas de género, historia y cultura indígena, y se espera que genere un debate enriquecedor sobre el papel de las mujeres en la historia de México. La presidenta Sheinbaum ha invitado a todas las mujeres a participar y a compartir sus voces, enfatizando que es un momento para honrar a aquellas que han sido silenciadas a lo largo de la historia.
Como parte de estas actividades, la Secretaría de Mujeres también lanzará un folleto digital que destacará a 400 mujeres indígenas que han hecho contribuciones significativas a la sociedad. Este recurso será una herramienta valiosa para educar a las nuevas generaciones sobre la riqueza cultural y la historia de las mujeres indígenas en México. Además, se emitirán cápsulas de radio a través de Radio Educación, que contarán con nueve capítulos dedicados a la vida y el legado de Malintzin y otras mujeres indígenas.
La reivindicación de Malintzin es un paso importante en la lucha por la visibilidad y el reconocimiento de las mujeres indígenas en México. A través de estas actividades, se busca no solo honrar su memoria, sino también empoderar a las mujeres de hoy, recordando que su historia es parte fundamental de la identidad nacional. La presidenta Sheinbaum ha hecho un llamado a la unidad y a la solidaridad entre las mujeres, invitándolas a ser parte activa de este proceso de reivindicación y reconocimiento.
La figura de Malintzin, lejos de ser solo un símbolo de traición, representa la complejidad de la historia mexicana y la resiliencia de las mujeres indígenas. A medida que se desarrollen estos eventos, será crucial que la sociedad en su conjunto reflexione sobre el papel de las mujeres en la historia y cómo sus contribuciones han sido a menudo ignoradas o malinterpretadas. La celebración de Malintzin es, en última instancia, una celebración de todas las mujeres que han luchado y continúan luchando por su lugar en la historia y en la sociedad.