La Ciudad de México enfrenta un desafío significativo en términos de gentrificación, un fenómeno que ha llevado a un aumento desmedido en los precios de alquiler y ha desplazado a comunidades enteras. En respuesta a esta problemática, la jefa de Gobierno, Clara Brugada, ha presentado un conjunto de 14 acciones destinadas a combatir la gentrificación y promover el acceso a vivienda asequible. Este plan, denominado «Por una ciudad habitable, asequible con identidad y arraigo local», busca estabilizar el mercado de alquiler y proteger a los inquilinos en la capital del país.
**Medidas para Regular el Mercado de Alquiler**
Una de las acciones más destacadas del bando es la estabilización de las rentas, que se propone limitar los aumentos a la inflación reportada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) del año anterior. Esta medida se fundamenta en el artículo 2448 del Código Civil, que establece la necesidad de crear instrumentos jurídicos que garanticen el cumplimiento de esta regulación. Además, se implementará un Índice de Precios de Alquiler Razonable y se identificarán Zonas de Tensión Inmobiliaria, donde los precios de alquiler han aumentado de manera alarmante.
Otra de las iniciativas incluye el fortalecimiento de la regulación sobre la renta de viviendas en ocupaciones de corta estancia y en plataformas de alojamiento temporal, como Airbnb. Esto busca evitar que la especulación inmobiliaria continúe afectando a los residentes locales, quienes a menudo se ven obligados a abandonar sus hogares debido a los altos costos de alquiler.
La creación de una Defensoría de Derechos Inquilinarios es otra de las propuestas clave. Esta entidad ofrecerá apoyo legal, mediación y defensa para los inquilinos que enfrenten situaciones de desalojo o abusos por parte de los arrendadores. Además, se impulsará una nueva ley de Rentas Justas, Razonables y Asequibles, que buscará establecer un marco legal más sólido para proteger los derechos de los inquilinos.
**Fomento de Vivienda Asequible y Participación Comunitaria**
El plan también prioriza la construcción de vivienda pública en zonas céntricas y de alta presión inmobiliaria, con el objetivo de satisfacer la creciente demanda de vivienda asequible. Se ampliará el arrendamiento social para grupos prioritarios, lo que permitirá que más personas accedan a espacios habitacionales dignos y asequibles. Además, se fortalecerá el apoyo a la vivienda en barrios populares, promoviendo la creación de condominios familiares que puedan albergar a más residentes.
Para abordar la especulación inmobiliaria, se implementarán medidas que fomenten la producción de vivienda asequible, asegurando que las nuevas construcciones respondan a las necesidades de la comunidad. La creación de un Plan Maestro será fundamental en este proceso, ya que se tratará de un instrumento de planeación participativa que involucre a los habitantes de las zonas más afectadas. Este plan definirá lineamientos y estrategias para el desarrollo urbano, asegurando que las decisiones se tomen en conjunto con la comunidad.
Además, se lanzará un programa de arraigo comunitario que buscará preservar el espacio público y el patrimonio cultural de las comunidades, fomentando la recreación y el fortalecimiento de la economía barrial. La participación comunitaria será esencial en la implementación de políticas de inclusión, convivencia y reducción de desigualdades, asegurando que las voces de los residentes sean escuchadas y consideradas en el proceso de toma de decisiones.
La mandataria Clara Brugada ha enfatizado que estas acciones son solo el inicio de un proceso profundo y estructural para transformar el acceso a la vivienda en la Ciudad de México. Con más de 2 millones 700 mil viviendas en la capital, la necesidad de soluciones efectivas es urgente, especialmente ante el alarmante aumento de hasta el 100% en los precios de alquiler en algunas áreas.
La implementación de estas medidas no solo busca frenar la gentrificación, sino también garantizar que todos los habitantes de la Ciudad de México tengan acceso a un hogar digno y asequible. A medida que se avanza en la discusión de estas propuestas, se espera que la colaboración entre el gobierno y la comunidad sea clave para lograr un cambio significativo en el panorama habitacional de la ciudad.