La Ciudad de México ha experimentado una notable disminución en los delitos de alto impacto, con una reducción del 62% en el primer semestre de 2025 en comparación con el mismo periodo de 2019. Esta información fue presentada por Clara Brugada Molina, jefa de Gobierno de la capital, quien atribuyó estos resultados a la efectiva coordinación entre la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y la Fiscalía General de Justicia. En este artículo, se explorarán las cifras detrás de esta disminución y las estrategias implementadas para lograrla.
**Cifras Reveladoras sobre la Delincuencia**
Durante la conferencia de prensa, Brugada Molina destacó que entre enero y junio de 2019 se registraron aproximadamente 26 mil delitos de alto impacto en la CDMX, mientras que en el mismo periodo de 2025, esa cifra se redujo a 10 mil. Esto representa un cambio significativo en la seguridad de la metrópoli, donde el promedio diario de delitos de alto impacto pasó de 128 en 2019 a 54 en 2025. Esta tendencia no solo es alentadora, sino que también sugiere que las estrategias de seguridad están comenzando a dar frutos.
Además, la jefa de Gobierno mencionó que la cifra de 54 delitos diarios es incluso inferior a los niveles registrados durante los momentos más críticos de la pandemia, cuando las restricciones de movilidad llevaron a una disminución general de la actividad delictiva. En términos de homicidios dolosos, también se observó una reducción del 12% en comparación con el año anterior, lo que refuerza la idea de que las políticas de seguridad están teniendo un impacto positivo en la reducción de la violencia.
**Estrategias de Coordinación y Seguridad**
La clave del éxito en la reducción de delitos, según Brugada, radica en la coordinación efectiva entre las distintas instituciones de seguridad. La colaboración entre la SSC y la Fiscalía ha permitido una respuesta más rápida y eficiente ante los delitos, lo que ha contribuido a la disminución de la impunidad y al aumento de la confianza de la ciudadanía en las autoridades. Esta sinergia es fundamental para enfrentar los desafíos que presenta la seguridad en una ciudad tan grande y compleja como la CDMX.
Pablo Vázquez Camacho, secretario de Seguridad Ciudadana, también se pronunció sobre las acciones llevadas a cabo en este periodo. Informó que se han detenido a más de 5 mil personas por delitos de alto impacto desde octubre de 2024 hasta junio de 2025. Estas detenciones son parte de una estrategia más amplia que incluye la implementación de operativos focalizados en las zonas con mayor incidencia delictiva, así como el fortalecimiento de la inteligencia policial.
La creación de un número nacional para denunciar la extorsión, que ha sido implementado en varios estados, es otro paso significativo en la lucha contra la delincuencia. Este tipo de iniciativas no solo busca empoderar a la ciudadanía para que se sienta segura al reportar delitos, sino que también permite a las autoridades tener un panorama más claro de la situación delictiva en el país.
**Impacto en la Percepción Ciudadana**
La reducción de delitos de alto impacto también tiene un efecto positivo en la percepción de seguridad de los ciudadanos. A medida que las cifras de criminalidad disminuyen, es probable que la población se sienta más segura y confiada en sus entornos. Esto puede llevar a un aumento en la participación ciudadana y en la colaboración con las autoridades, creando un ciclo virtuoso en la lucha contra el crimen.
Sin embargo, es importante señalar que, a pesar de los avances, la seguridad en la Ciudad de México sigue siendo un tema complejo. La violencia y la delincuencia son fenómenos multifacéticos que requieren un enfoque integral. La coordinación entre las instituciones es esencial, pero también lo es la atención a las causas subyacentes de la criminalidad, como la pobreza, la falta de oportunidades y la desigualdad social.
Por lo tanto, aunque los resultados actuales son alentadores, es fundamental que las autoridades continúen trabajando en estrategias que no solo se enfoquen en la represión del delito, sino también en la prevención y en la creación de un entorno más seguro y equitativo para todos los ciudadanos. La seguridad es un derecho fundamental y su garantía es responsabilidad de todos los actores involucrados en la vida pública de la ciudad.