En un momento crucial para la política internacional, el canciller mexicano Juan Ramón de la Fuente ha hecho un llamado a la comunidad global durante el 80º periodo de sesiones de la Asamblea General de la ONU. En su intervención, De la Fuente ha enfatizado la importancia de la inclusión de las mujeres en posiciones de liderazgo, así como la necesidad de adoptar una economía moral del bienestar que aborde la pobreza y promueva un comercio más justo. Estas propuestas no solo reflejan la postura de México en el ámbito internacional, sino que también subrayan un compromiso con la justicia social y la cooperación global.
La participación de mujeres en la ONU
Durante su discurso, De la Fuente destacó que es «tiempo de mujeres» tanto en México como en la ONU. Propuso que la próxima secretaria general de la ONU sea una mujer latinoamericana, con la esperanza de que esta elección impulse una transformación significativa en la organización. Mencionó a figuras destacadas como la ex presidenta de Chile, Michelle Bachelet, y la secretaria de Medio Ambiente de México, Alicia Bárcena, quienes han sido candidatas para este puesto.
La inclusión de mujeres en roles de liderazgo es un tema recurrente en la agenda internacional, y De la Fuente subrayó que la diversidad en la toma de decisiones es crucial para abordar los desafíos globales actuales. La voz de las mujeres, especialmente de aquellas que provienen de regiones históricamente marginadas, puede aportar perspectivas valiosas que fomenten la paz y la justicia en el mundo.
La propuesta de una economía moral del bienestar
Uno de los puntos más destacados de la intervención de De la Fuente fue su llamado a implementar una economía moral del bienestar. Esta propuesta busca movilizar coaliciones regionales para combatir la pobreza y fomentar un comercio más equitativo. Según el canciller, «el combate a la pobreza es la inversión con la mejor tasa de rendimiento financiero y social». Esta visión implica un cambio en la forma en que se concibe el desarrollo económico, priorizando el bienestar de las personas y el respeto por el medio ambiente.
De la Fuente argumentó que la nueva política en México se basa en una visión de justicia y desarrollo social inclusivo. Este enfoque no solo busca mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos mexicanos, sino que también promueve la cooperación con otros países, sin aceptar subordinación. La soberanía nacional es un principio irrenunciable que guía la política exterior de México.
Rechazo a la criminalización de migrantes
En su discurso, el canciller también abordó el tema de la migración, rechazando la criminalización de los migrantes. De la Fuente enfatizó que los migrantes son personas con derechos que buscan cuidar de sus familias y contribuir a sus comunidades de acogida. Para avanzar hacia una movilidad segura y ordenada, es fundamental entender las causas estructurales de la migración y trabajar en colaboración con otros países.
El canciller afirmó que México no escatimará esfuerzos para proteger a sus ciudadanos en el extranjero, asegurando que recibirán el apoyo y la asistencia que necesiten. Esta postura refleja un compromiso con la dignidad humana y el respeto por los derechos de todos, independientemente de su situación migratoria.
La defensa de la paz y el derecho internacional
Frente a los representantes de los países miembros de la ONU, De la Fuente reiteró la necesidad de frenar la carrera armamentista y reivindicar el derecho internacional. Subrayó que la ONU debe retomar sus labores fundamentales de conservación de la paz, especialmente en un contexto global marcado por conflictos armados en diversas regiones.
El canciller hizo un llamado a poner fin a las guerras en lugares como Gaza, Ucrania y otros conflictos en curso, señalando que el sufrimiento humano causado por la guerra es intolerable. La paz, según De la Fuente, es un objetivo que debe ser perseguido con urgencia, ya que los conflictos actuales amenazan con desatar una escalada bélica aún más destructiva a nivel global.
La postura de México en el ámbito internacional
La intervención de Juan Ramón de la Fuente en la ONU no solo resalta la voz de México en la comunidad internacional, sino que también refleja un compromiso con valores fundamentales como la justicia, la inclusión y la paz. A medida que el mundo enfrenta desafíos complejos, la propuesta de una economía moral del bienestar y el énfasis en la participación de las mujeres en la toma de decisiones son pasos significativos hacia un futuro más equitativo y sostenible. La defensa de los derechos de los migrantes y la promoción de la paz son elementos clave en la agenda de México, que busca contribuir a un mundo más justo y solidario.